Hay quien practica el revival y el homenaje... Y hay quien, por el contrario, prefiere convertirse en médium. Lo del Kresy tiene cero de revival y homenaje: sus producciones, con el último EP “Ode to New York” (Freerange, 2014) a la cabeza, son lo más parecido a verse en medio de una sesión de espiritismo que traiga hasta el presente los espíritus (danzantes) del house primigenio y del garage más lúbrico. Pero el asturiano no se contenta con practicar la ouija en el estudio, ya sea con sus propios temas o sus remezclas, sino que sabe cómo convertir sus sesiones en una oda al hedonismo de hace décadas, aquel que todavía no había sido ni cortado ni adulterado.